
El episodio tuvo lugar la semana pasada en una veterinaria de la calle Yrigoyen en Morón sur. Un vecino llevó a su perro para que lo bañen, vieron una herida en su cuello, lo suturaron y luego murió. El dueño golpeó al encargado del local.
La semana pasada, Claudio Burgarella recibió agresiones tanto verbales como golpes en el creáneo y otras partes del cuerpo. El responsable fue Cristian Javier Sosa. Este último llevó a su caniche a la veterinaria Adap. “Lo llevó con un corte en el cuello, pero era un animal que ya venía con un tratamiento de parasitosis. Lo suturaron, se lo dieron y se fueron. Pero al rato el perro falleció. Después, el dueño fue a la veterinaria directamente a atacar al profesional”, detalló Horacio Fernández (propietario del Hospital Veterinario de Laferrere) al sitio Primer Plano Online.
A raíz de este episodio violento, las veterinarias permanecerán cerradas el miércoles 27. Sólo atenderán urgencias y otras directamente tomaron la decisión de no abrir. Quienes estén al frente de cada local llevarán un brazalete negro y darán las explicaciones del caso como forma de manifestarse.

“Uno no pone una veterinaria para matar animales. Se preparó para salvar vidas, pero a veces no se puede. Y eso no habilita a que nos terminen golpeando, insultando o escrachando en redes”, completó Fernández.
El tratamiento implicaba que los dueños le hicieran cortes de pelo al can en su domicilio para tratarlo contra las garrapatas, en ese marco, le cortaron parte de una tetilla, lo que ocasionó la lesión, luego suturada en el veterinario tras una infección. El objetivo era que volvieran con el perro al otro día, cosa que no sucedió porque falleció.
Luego de dejar al veterinario en el piso, Sosa fue detenido pero liberado a las pocas horas debido a que la jueza de Garantías, Mariana Tschiffely remarcó que no debía continuar encarcelado. De todos modos, dictaminó una perimetral entre el afectado y su agresor.
Sin embargo, los antecedentes de Sosa modificaron el panorama. Cuenta con antecedentes por robo, lesiones, tenencia ilegal de un arma de guerra y robo calificado por uso de arma. Al conocerse estos datos, la jueza ordenó su detención. Se acercaron a su casa efectivos policiales y no pudieron dar con el. Actualmente se encuentra prófugo de la Justicia.